Continúan un día más las protestas de los vecinos del madrileño Barrio de Salamanca contra la gestión del gobierno de Pedro Sánchez durante la crisis del coronavirus. La calle Núñez de Balboa ha vuelto a ser el lugar elegido para la concentración, y de nuevo las caceroladas han sonado desde los balcones. Pero esta vez la fuerte presencia policial ha impedido que se repitieran las aglomeraciones de los últimos días.