Las calles madrileñas se encuentran prácticamente vacías. En el centro
de Madrid, en la calle Preciados, la imagen es inusual: las persianas
están bajadas y los comercios cerrados. Lo mismo ocurre en la Puerta del
Sol, que se encuentra vacía.
Sin embargo, hay muchos trabajadores que sí tienen que acudir a sus
puestos de trabajo. Hablamos con algunos de ellos para que nos cuenten
cómo están viviendo esta situación y qué facilidades les están otorgando
desde sus empresas para superar esta crisis.