El sociólogo e investigador, Boris Ríos, en entrevista para teleSUR, explicó "que en el golpe de Estado ha existido un amotinamiento de las fuerzas policiales que han violado la Constitución política de Estado al no cumplir el mandato constitucional que tenían de proteger a las entidades públicas y a los servidores públicos. Ante esta situación, muchos sectores se han sentido terriblemente ofendidos cuando también la policía ha sido quien ha quitado de las instituciones públicas el símbolo indígena originario que es la Wiphala". Por otro lado, el ministro del Gobierno de facto, Arturo Murillo, ha renovado un viejo discurso en el que trata de encontrar un enemigo interno y acaba de dar una declaración que está totalmente fuera de lugar: "nadie en un país democrático puede quitarle el derecho a votar a otra persona. Lo que él está haciendo es demostrar que estamos viviendo en una total dictadura". teleSUR