La escena parecía sacada de una serie de médicos y sonaría inverosímil si no fuera porque ocurrió en la vida real: un médico tuvo que succionar casi un litro de orina tras improvisar un catéter para salvarle la vida a un hombre con problemas de vejiga durante un largo vuelo de China hacia Nueva York.
Los hechos ocurrieron el martes en un vuelo de China Southern Airlines que partió desde Guangzhou con dirección a Nueva York, uno de los más largos del mundo.
El hombre pidió ayuda a las azafatas y a los miembros de la cabina poco después de cumplirse la décima hora de vuelo. El ciudadano chino se quejó de que no podía orinar con normalidad cuando al viaje le faltaban unas seis horas más.