El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, creó el miércoles un nuevo frente de crispación diplomática al rechazar las crÃticas de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, descalificando la competencia de la expresidenta chilena y atacando a su padre, torturado por la dictadura de Augusto Pinochet.