Madrid, 6 ago (EFE).(Imágenes: Raúl García).- En España hay más de 12.300 menores extranjeros que viajan solos, según el registro oficial del Ministerio del Interior, que no refleja el dato real. La tutela de los niños es de las comunidades y estas no pueden impedir que los menores se desplacen de unas a otras o que abandonen España.
La principal puerta de entrada de estos menores extranjeros que viajan solos es Andalucía, donde están inscritos 5.183 niños; seguida de Cataluña, con 1.938, y Melilla, con 1.067 niños, según los últimos datos del Registro MENA, a 30 de abril de 2019, a los que ha tenido acceso Efe.
La llegada de menas se ha duplicado respecto a 2017, cuando había 6.414 niños, un número que ya significó entonces un incremento del 60 % respecto a 2016.
Unas cifras de menas que nada tienen que ver con las que ofrecen los gobiernos autonómicos, preguntados por Efe, que sitúan a Cataluña a la cabeza, con 4.203 menores extranjeros solos, seguida de Andalucía, que reconoce tutelar 2.172 niños.
La contabilidad de los menas se complica además por el momento político, en el que en algunas regiones están formado nuevos gobiernos o los recién llegados son incapaces o no quieren concretar esa cifra de niños extranjeros solos bajo su tutela.
El número va cambiando por meses, reconocen la mayoría de las comunidades, ya que a los menores no se les puede obligar a permanecer en los centros asignados para iniciar sus trámites y algunos deciden, muchas veces ante el hacinamiento de esos lugares, irse a otras comunidades e incluso seguir su ruta por Europa, donde tienen conocidos o familiares.
LOS MENORES NO ESTÁN PRIVADOS DE LIBERTAD
"Los centros no tienen medidas coercitivas, los menores no están privados de libertad y para muchos es más cómodo estar fuera de control. Aunque sea difícil, hay que intentar convencerlos de que dentro van a estar mejor", explica a Efe el fiscal de Sala Coordinador de Menores, Javier Huete.
Según Huete, se puede saber "los menas que han entrado y los que han ido a un centro de acogida en una comunidad, pero los menores se van, hay muchas fugas y hay mucha movilidad; no sabemos los que han dado el salto fuera de España, porque hay niños que atendimos en una región y han aparecido en Francia, Alemania o Bélgica".
"La sobresaturación de estos centros de primera acogida hace que esos jóvenes no quieran permanecer allí, porque no tienen las condiciones adecuadas, no hay espacio y la propia experiencia vital que han tenido durante el viaje que han realizado durante meses, con situaciones traumáticas, los hace reacios a permanecer en ellos", añade.
CATALUÑA SUPERA A ANDALUCÍA
Los datos facilitados por los gobiernos autonómicos sitúan a Cataluña a la cabeza respecto al número de menas bajo su protección.
Así, a 30 de junio Cataluña tenía 4.203 menas (en el registro de Interior figuran 1.938); en 2018, había 3.697; en 2017, 1.435, y en 2016, 637.
La Generalitat ha realizado varias ampliaciones de plazas -3.000 el ú