El Secretario de Seguridad Interior de los Estados Unidos, John F. Kelly afirmó que “no habrá deportaciones masivas de inmigrantes y se respetará la dignidad humana. Todo lo que hacemos es legal, según nuestro sistema jurídico. Las deportaciones se concentrarán en elementos delictivos y no se van a utilizar fuerzas militares en operaciones migratorias”, aseguró.