Gritos a favor y en contra del ultraderechista Jair Bolsonaro. Una población enfrentada que abarrota las calles de Brasil. El candidato, tras la primera vuelta de las elecciones presidenciales en las que consiguió un aplastante 46 por ciento de los votos, ha cambiado radicalmente su estrategia. Bolsonaro, con un reconocido discurso homófobo, racista y machista busca ahora el voto del colectivo LGTBI y aparece con un famoso maquillador homosexual, que le apoya y le adula. Tan sólo quedan dos semanas para la segunda vuelta de las elecciones y en esta repentina moderación, Bolsonaro ve ahora la oportunidad de ser el próximo presidente de Brasil.
-Redacción-