La ministra de Educación y Formación Profesional, y portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha explicado que el Gobierno considera los abucheos "libertad de expresión", pero ha matizado que "los insultos deberían estar fuera de toda crítica política". "El Gobierno es consciente de que a veces los abucheos de las personas no son muy espontáneos", ha señalado.