Millones de personas visitan hoy a sus difuntos en este día de Todos los Santos. Pero muchos cementerios son además lugares donde la arquitectura y la escultura comparten protagonismo con el recuerdo. Un ejemplo es el de Dumbria, repleto de cipreses de acero y cristal que albergan hasta 40 columbarios. O declarados de interés cultural como el de Igualada, en Barcelona.