La aventura americana de Isabel se convirtió de repente en una odisea. Pasaba el curso en Paradise con una familia de acogida. El viernes al levantarse vio llamas muy cerca de casa. Pero la tranquilizaron. Llegó incluso a ir al instituto, donde se ordenó la evacuación. Salió en coche con el resto de su familia americana.Pronto se vio que escapar por carretera era imposible. "Ha habido un momento que estábamos fuera del coche y nos han hecho salir porque venía el fuego hacia nosotros y hemos tenido que salir corriendo del coche", recuerda. Ahora, Isabel se recupera del susto. La casa donde vivía es de las pocas que quedan en pie en Paradise. Aunque ella ha tenido que cambiar de localidad y de instituto. Demasiadas emociones cuando se está a nueve mil quinientos kilómetros del hogar.
-Redacción-