Llueven los twitts con el hashtag #PerattaEnArroban y Diego Ripoll va leyendo algunos para que Sebastián Peratta vaya contando lo que la gente quiere saber. ¿Qué sintió al ser borrado por Caruso Lombardi en Quilmes? El mensaje viene con opciones: a) odio, b) ira asesina o c) ambas son correctas (?)\n\nNuestro invitado dice "Todo". Cuenta que le quedaba un año de contrato en Newell's y recibió el llamado de Nelson Vivas para ir a jugar a Quilmes. Quería cerrar el ciclo en Newell's de la mejor manera ya que acababa de salir campeón. Por esas cosas del fútbol Nelson duró poco en el Cervecero. La oferta que le hicieron a Peratta fue dos años de contrato, con una cláusula que establecía activar el segundo año solo si el arquero tenía jugaba el 60% de los partidos del primer año. Tengamos en cuenta que la edad de Peratta era 37 años.\n\n"Por buena leche y por entender algo que era coherente le digo 'Bueno bárbaro, me parece bien'. Yo dije 'Si no puedo jugar el 60% de los partidos en Quilmes está bien'. Me parece bien que no se haga", recuerda Peratta.\n\nEl 60% de los partidos del primer año significaba 22,4 teniendo en cuenta que eran treinta y ocho partidos en la temporada. La dirigencia consideró que la prueba al nuevo arquero titular se la tenían que dar cuando Peratta jugó 22 partidos (?) Con jugar un tiempo o unos minutos más, se activaba el segundo año del contrato. \n\nSe lo tomó con buen humor y no se sorprendió. "Eso es el fútbol", resume Peratta. Alfre Montes pregunta si el gremio no debería haberlo bancado. Peratta dice que no, que el club estaba en su derecho de hacer lo que hizo: "Es una decisión del entrenador".\n\nQuilmes estaba peleando por no descender y luego de su salida se hablaron muchas boludeces involucrándolo. Peratta le advirtió al club que hicieran lo que quisieran con su contrato, pero que no lo metieran en quilombos porque él también iba a salir a hablar y la guerra de micrófonos no beneficiaba a nadie.