La mañana de este martes, amigos, familiares y conocidos de la familia Altuve Guerrero continuaban llegando la casa del joven para darle un último adiós en el sector 12 de Octubre de Petare.
Erick Altuve, de 11 años de edad, es el cuarto niño fallecido en el hospital J. M. de los Ríos durante el mes de mayo. Altuve esperaba por un trasplante de médula ósea ya que padecía de un linfoma no Hodgkin y murió de un paro respiratorio en dicho centro hospitalario el 26 del mes en curso. Según familiares, murió por la falta de un insumo que se encontraba bajo llave en la oficina de la directora del centro hospitalario. También denunciaron que pudo haber ocurrido una mala praxis médica cuando introdujeron unos tubos hacia los pulmones de Erick ocasionando una hemorragia y posteriormente un paro respiratorio.
La abuela de Erick, Diana Méndez, hizo un llamado a todas las personas de no abandonar a todos los niños que quedan en el hospital JM de los Ríos.
"El hospital se encuentra en estado crítico. No hay medicamentos, no hay nada, el personal trabaja con las uñas (...) a mi nieto le colocaron un catéter y desde ese momento empeoró. Luego le pusieron un tubo hacia los pulmones y comenzó a botar sangre. Nos mandaron a hacer una placa para ver cómo había quedado, le faltó 1 cm para quedar a nivel con el otro tubo, pero ellos no van a decir que hicieron algo mal. No todos los doctores fueron malos, muchos son excelentes y trabaja con las manos. Aquí el problema es la directora que no le da la cara a sus pacientes", denunció Méndez.
El pasado lunes falleció otro niño en el J. M. de los Ríos, en Caracas. Yoider Carrera, de 2 años de edad, presentaba un estado de salud delicado y por falta de insumos médicos murió. Sería el 5to niño que muere en ese centro asistencial en menos de 7 días.
Se espera que el cuerpo de Erick Altuve sea enterrado la mañana del 29 de mayo en el Cementerio El Cercado, en Guatire.
“Nos apoyan desde el exterior”
Virginia Montes viajó con su esposo desde Barquisimeto, en Lara, para poder aplicarle el tratamiento a su pequeño hijo. Indicó que no posee los recursos para adquirir las quimioterapias que el niño necesita y por ello ha apelado a la solidaridad a través de las redes sociales.
“Gracias a una muchacha que nos apoya poniendo la foto del niño en Instagram hemos podido hacerle sus sesiones. También hay personas que nos ayudado desde el extranjero, porque nosotros no tenemos cómo comprarle las quimio”, relató.