Una madre se coordinó con los bomberos para rescatar a su hija de cuatro años de un pozo profundo en la provincia central china de Henan el domingo. La niña cayó accidentalmente en el pozo durante una excursión cuando trataba de coger una fruta. Debido al diámetro estrecho del pozo de solo 40 centímetros, ninguno de los rescatistas en el sitio pudo descender hasta el fondo del pozo a 10 metros del suelo para ayudar a la niña. Después de asegurarse de que la niña agarró las cuerdas correctamente, los rescatistas comenzaron a tirar de las cuerdas. Cuando la niña se levantó a alrededor de un metro de la boca del pozo, un rescatador rápidamente agarró sus brazos y la sacó. La niña, después de recibir algún tipo de atención médica en el lugar, fue enviada a un hospital para un chequeo completo.