Torra ha querido enmarcar su declaración judicial en un entorno monumental, bajo el arco del Triunfo y arropado por miembros de su gobierno y diputados soberanistas. Las asociaciones independentistas convocaron un acto de apoyo que ha resultado menos numeroso que otros anteriores.
Abrazado a su mujer ha recorrido los últimos metros antes de declarar ante el juez. La fiscalía sostiene que cometió un delito de desobediencia por no acatar el requerimiento de la Junta Electoral Central. Le pedía retirar las pancartas y lazos amarillos de la Generalitat. UN mandato que intentó sortear sutituyendo la pancarta por otra, que tampoco cumplía la norma. En sus 45 minutos ante el juez, Torra ha defendido el derecho a la libertad de expresión y argumenta que la Junta Electoral no fue precisa, no era competente, y actuó con parcialidad, "con una clara intencionalidad política. Es una maniobra orquestada", ha añadido.
Está investigado por un delito castigado con multa e inhabilitación.
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