El título III de la Ley Helms-Burton autoriza la reclamación ante los tribunales de Estados Unidos de la compensación por las propiedades nacionalizadas en Cuba en 1960, luego del triunfo revolucionario, y establecer demandas judiciales contra empresas cubanas. La Ley contempla la internacionalización del bloqueo, la negativa de créditos y ayuda financiera a países y organizaciones que favorezcan o promuevan la cooperación con Cuba, lo cual dificulta la inversión extranjera en la isla. teleSUR