La isla de Mallorca ha amanecido con un manto blanco que nadie se quiere perder. Aquí la nieve no invita al refugio sino a la diversión, no ha nevado a nivel del mar como lo hizo ayer en Palma... pero si lo ha hecho en las partes altas. La nieve incluso ha obligado a cortar varias carreteras, pero no ha impedido la peregrinación a pie en búsqueda de un muñeco de nieve. Las máquinas quitanieves siguen trabajando contra las inclemencias del tiempo, mientras que la costa de la isla está en alerta naranja por fuertes vientos.