Este sábado en la isla de Mindanao, en el sur de Filipinas, un terremoto de 6.7 grados en la escala sismológica de Richter ha causado al menos la muerte de seis personas y ha dejado más de un centenar de heridos. El epicentro del temblor ha tenido lugar a 10 kilómetros de profundidad, a unos 13 kilómetros al este de la ciudad de Surigao. Precisamente, el núcleo urbano de Surigao se ha llevado la peor parte. Cortes de electricidad y viviendas reducidas a escombro es el trágico balance del seísmo allí. Un vecino de Surigao ha explicado que el terremoto ha ocurrido en plena noche, cuando todo el mundo estaba durmiendo.
-Redacción-