Tras la sesión de entrenamiento del Alavés, en la que se ha podido ver a los jugadores trabajando carrera continua con toques de balón, su entrenador Mauricio Pellegrino hablaba ante los medios. Tras la polémica desatada por la petición de los vitorianos de aplazamiento del partido contra el Celta para garantizar la igualdad entre equipos, ha querido aclarar que tanto él como el equipo querían jugar hoy y a nadie se le pasó por la cabeza un aplazamiento.
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