La cadena de supermercados SúperSano lo tiene claro y ya no vende productos elaborados con aceite de palma. Ahora las grandes superficies se plantean eliminarlo en sus marcas blancas. Una revolución porque la mitad de la cesta de la compra esta regada por este económico aceite que embellece y conserva bien el producto. Ninguna normativa europea prohíbe su uso aunque están estudiando los efectos denunciados. Su monocultivo también es polémico. En Indonesia se produce el 50% del aceite de palma y por ello se han deforestado allí 31 millones de hectáreas, la superficie de Alemania. Han acabado así con el hábitat del orangután, ya han muerto más de 50.000 en veinte años.