Activistas de Greenpeace han derramado este lunes 3.000 litros de un falso vertido de petróleo ante la sede de la compañía Total en París, en Francia. Una acción de protesta contra un proyecto de explotación petrolera que Total tiene planeado ejecutar en la desembocadura del río Amazonas, en Brasil. Los miembros del grupo ecologista se han encargado de extender el líquido negro a las puertas de la empresa y después han posado ante la entrada de Total, vestidos con monos blancos y sujetando pancartas con lemas como "Total, amenaza oficial del arrecife del Amazonas" o  "Salvemos el arrecife del Amazonas".
-Redacción-