Dos personas están detenidas en el interior de este coche patrulla. De repente, uno de ellos aprovecha el descuido de los policías, que se encuentran dentro del edificio y huye así por la ventana del vehículo. El agente que está en el puesto de vigilancia se da cuenta y aunque intenta cogerle no lo consigue. 30 segundos después, el otro detenido escapa también del coche patrulla, pero él, mucho más listo, huye en dirección contraria. Cuando la Policía se da cuenta ya no puede hacer nada por detenerles pero poco más tarde dan con ellos.
-Redacción-