El presidente del Gobierno y el de la Generalitat comparten hoy mesa y mantel en el Salón del Automóvil de Barcelona. En un momento de máxima tensión entre los dos Ejecutivos a cuenta del proceso independentista catalán. La última vez, que se sepa, que ambos mantuvieron un encuentro discreto fue el pasado 11 de enero y, desde entonces, el cruce de acusaciones no ha cesado. Tampoco ha faltado el ingrediente judicial, con la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, acudiendo a declarar por segunda vez por un delito de desobediencia al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. La Generalitat no ha dejado de dar pasos hacia el referéndum, que quiere celebrar en septiembre, y hasta ha licitado la compra de 12.000 urnas. Anuncio por el que la Fiscalía General del Estado ya prepara una querella.
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