Los vecinos de la Vila Olímpica de Barcelona siguen en pie de guerra y haciéndose oír para impedir la construcción de un albergue juvenil con 440 plazas en 2.300 metros cuadrados en pleno barrio residencial. La apertura del albergue supondrá, dicen los vecinos, soportar las molestias que puede generar el turismo de borrachera. La plataforma de vecinos considera que ya soportan la presencia de excesivos hoteles y bares en los alrededores. Piden al Ayuntamiento que pare la apertura del albergue y que se negocie con los propietarios el cambio de uso.
-Redacción-