Este viernes los 27 jugadores del Athletic de Bilbao tenían una sorpresa preparada para su compañero Yeray Álvarez. El central ha sufrido una recaída en su enfermedad, un cáncer testicular, por lo que sus compañeros decidieron solidarizarse con él rapándose la cabeza. Le esperaron escondidos y en silencio en el vestuario. Al final terminaron abrazados y coreando el nombre del futbolista. Josean Lekue, médico del Athletic, ofreció esta semana una rueda de prensa en la que aseguró que el estado del futbolista es muy bueno. Si todo sale bien, Álvarez se incorporará dentro de tres meses. 
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