Desde primera hora de la mañana, la Guardia Civil inspecciona cada rincón de la casa incendiada en El Palmar. La investigación continúa abierta porque la casa, en un principio, no pasaría la normativa urbanística antiincendios. Esto ha reabierto la polémica de las casas prefabricadas en esta zona: si son irregulares y si cumplen con las normativas de seguridad. El juez ha decretado que de momento los cuerpos de la pequeña, su padre y el amigo de este no sean incinerados. Esta mañana, en Sevilla, rotos de dolor, familiares, amigos y vecinos han dado su último adiós a Julia y a su padre, José. El amigo, Luis, ha sido enterrado también esta mañana. Con el 90% y 70% de sus cuerpos quemados, la madre Carmen y Jaime, el pequeño de 9 años, continúan ingresados en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Virgen del Rocio de Sevilla. En estos momentos continúan en estado crítico.