La cola llegaba hasta la calle. Aeropuerto de Barcelona abarrotado por una inmensa cola en el primer día de paros parciales en los controles de seguridad. "La facturación se ha abierto dos horas antes del vuelo así que no ha servido de mucho venir antes", comentaba un viajero. Con ese problema que se han encontrado muchos viajeros. Nervios entre algunos por perder el avión. La cola para pasar el control superaba la hora de espera. Viajeros resignados e incluso comprensivos. Mientras, caras largas en la reunión entre sindicato, empresa concesionaria y AENA, que ha accedido a medias en el conflicto. Si no se resuelve el conflicto, a partir del 14 agosto habrá huelga indefinida.
-Redacción-