Más de 120.000 personas han tenido que ser desalojadas por la erupción del volcán Agung, en la isla indonesia de Bali. Su cráter expulsa humo y ceniza a más de dos kilómetros de altura. El Agung es uno de los 130 volcanes activos en el país, por lo que muchos indonesios viven muy cerca de ellos y cuando saltan las alertas, es preciso evacuarlos de sus hogares. La última vez que éste entró en erupción fue el año pasado y causó la muerte a seis personas.
-Redacción-