Podría parecer un restaurante normal, incluso uno por encima de la media, teniendo en cuenta la preparación de los platos; pero hay un par de detalles que son reveladores: estos barrotes y su nombre, "Interno". Sí, este es el restaurante que han abierto en la cárcel de mujeres de San Diego, en la ciudad caribeña de Cartagena, en Colombia. El "lugar de las segundas oportunidades", reza su lema. Un local que se ha puesto de moda entre los comensales que buscan una experiencia diferente. Porque aquí son las presas las que sirven las mesas, las que aprenden cocina y preparan los platos diseñados por chefs de prestigio como el español Koldo Miranda.  La experiencia, inspirada en el restaurante InGalera de la cárcel de Milán, ayuda a la reinserción de las internas a su salida de la cárcel, y ayuda también a cambiar la percepción que la sociedad tiene de ellas.
-Redacción-