Testigos de la desgracia que a Luna se le vino encima cuando las llamas quemaron su casa. Aunque afortunadamente no había nadie dentro, el fuego originado en un brasero dejó todo calcinado. En sólo un fin de semana sus vecinos se han volcado en ayudarla: bolsas de ropa, muebles, etc. En el ampa han cubierto las necesidades básicas de la familia, también en el bar una hucha recoge más ayuda. La solidaridad de este barrio obrero ha conseguido volver a dibujar la sonrisa de esta madre de Sevilla.