Durante cuatro días ha estado huído con sus tres hijos menores. Se los llevó de casa tras discutir con su mujer pero la policía le localizó en Portugal. Le detenían en un supermercado en la localidad lusa de Vila Real de Santo Antonio. Los agentes portugueses le encontraron cuatro armas y 247.000 euros. Ahora, la madre, que está protegida por el protocolo de víctima de malos tratos, espera reunirse con los niños lo antes posible.