Los vecinos de Las Torres de Cotillas han tratado de impedir que Paquita pierda su casa y su negocio, un pequeño bar con el que mantiene a toda su familia. Pero el desahucio se ha ejecutado y toda la familia, también dos menores, se quedan sin casa. La desgracia de Paquita comenzó hace 29 años cuando su marido se jugó la casa a las cartas y la perdió dejando una deuda de 3000 euros mientras desaparecía. Paquita desconocía la existencia de esa deuda hasta que 24 años después el prestamista se presentó en la vivienda pidiéndole 90.000 euros. Paquita lo ha denunciado por falsedad documental pero esa denuncia no ha conseguido paralizar el desahucio. Ahora que lo ha perdido todo Paquita pide, al menos, un alquiler social.
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