Se bajaron de la bicicleta para denunciar sus condiciones laborales. Inspección de Trabajo de Valencia les acaba de dar la razón a estos repartidores de Deliberoo. Según Inspección son asalariados, falsos autónomos y Deliveroo debe 160.000 euros en cotizaciones sociales no pagadas por sus casi 100 trabajadores en Valencia. Esta la lucha se extiende a otras ciudades donde algunos temen represalias si hablan. Ahora se avecina una larga carrera en los tribunales porque la empresa ha anunciado que recurrirá la decisión de inspección.