Tras el encuentro de Pedro Sánchez y Quim Torra en el Palacio de Pedralbes, ambos se han reunido de nuevo en la cena anual de Fomento del Trabajo.
Ha sido en esa cena con empresarios, donde Torra se ha referido al comunicado conjunto donde ambas administraciones han optado por "emplazarnos en el diálogo para encontrar una solución democrática". En catalán ha vuelto a pedir "un referendum de autodeterminación".
Pedro Sánchez le ha seguido en el uso de la palabra y ante los empresarios, el suyo ha sido un discurso económico con mensaje de fondo. Estabilidad política y económica, inevitablemente unida a "nuestro compromiso con dotar al país de unos nuevos presupuestos del Estado".
El presidente ha expuesto la receta, "diálogo, estabilidad, autocrítica e impulso transformador". Ingredientes para una convivencia, porque ha dicho el presidente "juntos hemos llegados siempre mucho más lejos" y para abrir una nueva etapa en la que la confrontación dé paso a la concordia.
Antes, la consejera de Presidencia catalana, Elsa Artadi se refería a que tanto Torra como Sánchez ha identificado el problema y comparten la solución. Existe, ha dicho "un conflicto sobre el futuro de Cataluña", pero ambos "comparten, por encima de todo su apuesta por el diálogo efectivo".
Diálogo que ha empezado a dar sus primeros pasos y que proseguirá el próximo mes de enero, cuando se vuelvan a reunir ambas Administraciones.