El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha pedido apoyo a representantes de las principales empresas familiares catalanas.Durante la presentación de un libro les ha exigido que no pasen de la política y se impliquen. Por su parte, el presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, le ha advertido de que los empresarios dnecesitan un entorno de estabilidad para llevar adelante sus proyectos.Mientras el Tribunal Constitucional empieza a discutir sobre la declaración soberanista del Parlamento de Cataluña. A ninguno de los magistrados le gusta pero están divididos en si esa declaración podría tener efectos jurídicos a estudiar.