Expectación en el aeropuerto de Simferopol, la capital de Crimea, ante la llegada, este sábado, de observadores internacionales invitados por Rusia.Son casi 70 y llegan desde 21 países, según informan las autoridades crimeanas. Y se encargarán de monitorizar las votaciones del referéndum de este domingo.Pero el día a día de los vecinos de la península continúa. Aunque divididos por la consulta, la mayoría apoya la secesión de Ucrania y la adhesión a Rusia. Es lo que también quiere Vladimir, un hombre de 70 años que se acerca a comprar la prensa. Afirma que él nació en Simferopol cuando era de Rusia y que le gustaría morir en un Simferopol otra vez ruso.Futuro incierto en Crimea en tanto que EEUU y la Unión Europea no reconocen el referéndum, en el que no habrá observadores occidentales. Y en el que todas las encuestas dan una abrumadora victoria al sí a la adhesión a Rusia.