Correo por correo, todo lo que hablaron Miguel Blesa y la cúpula de Caja Madrid sobre preferentes en 2009 va a ser mirado con lupa por el juez Fernando Andreu. Desde hoy, esos correos corporativos cuentan como prueba para investigar el producto de alto riesgo con el que miles de clientes han perdido sus ahorros. En ellos, Blesa mostraba dudas sobre si los trabajadores de la caja iban a colocar las preferentes con éxito. Esa cautela se convirtió en euforia en cuanto el director de negocios informó a Blesa de la rapidez con la que estaban comercializando el producto. Son correos que ya conocíamos porque otro juez, Elpidio Silva, intentó incorporarlos al caso Blesa sin éxito. La diferencia es que él no cribó e incluyó los mails personales, que en la causa de las preferentes no van a tenerse en cuenta. -Redacción-