Hasta doce tiros contra el tiburón que ha matado a un bañista en Nueva Zelanda.La policía acababa así con el escualo que ha atacado por sorpresa a un hombre de 48 años sin que nadie pudiera ayudarle.Fue tan rápido, dice este chico, en un segundo desapareció.Cuando reapareció con la cabeza bajo el agua, dice este otro , supimos que estaba muerto.Recuperar su cuerpo también  ha sido una odisea.El helicoptero que acudió en su ayuda ha tenido que realizar maniobras para distraer al tiburón que no se separaba de la víctima.El bañista era un hombre de 48 años que se entrenaba para una competición este fin de semana. Destrozados, su familia y amigos le rendían en la playa este pequeño homenaje.