El autor confeso del robo del Códice Calixtino, José Manuel Fernández Castiñeiras, ha entregado al juez 15 folios denunciando robo y prácticas sexuales en el ámbito religioso del entorno de la catedral de Santiago. Asegura que presenció relaciones sentimentales intensas, actitudes más que paternales o palmaditas en el culo. El juez del caso, José Antonio Vázquez Taín, habla de "desvaríos inconsistentes" porque el informe contiene una serie de "imprecisiones y vaguedades" de una temeridad absoluta.La Catedral denunciará por vulneración al honor, pero está visto que el apóstol no gana para disgustos.