El estudio "Values And Worldviews", de la Fundación BBVA, es una radiografía de las opiniones políticas y económicas de los europeos. Y estas dibujan dos bloques. Por un lado, los países del norte, como Suecia, Dinamarca o Alemania. Sus ciudadanos están más informados -más de la mitad lee el periódico a diario-, y participan más en asociaciones de tipo político, social o cultural. Valoran algo mejor a sus representantes y culpan mayoritariamente a los países del sur de la crisis económica, precisamente, donde ésta más afecta. Según Mariana Szmulewicz, analista de la Fundación BBVA, esta percepción de cómo afecta la crisis a cada una de las economías nacionales es una de las divergencias más claras del estudio. "Por un lado están países como España donde más del 80% cree que la crisis que atraviesa su economía es muy grave, por otro, países como Alemania, Dinamarca o Suecia donde no llega al 20% esta percepción de esta gravedad", explica. Los europeos del sur son más críticos con sus gobernantes y su nivel de confianza en las instituciones es menor. Donde coinciden todos es en querer mantener el Estado de Bienestar y su independencia ante la Unión Europa. En ningún país son mayoría quienes quieren ceder competencias en política económica. Es más: la mayoría los miembros de la zona euro creen que la moneda común les ha perjudicado, pero dar marcha atrás no es una opción. Según la analista, "el 67% de los europeos cree que el euro no va a desparecer" El único país donde son mayoría quienes piensan lo contrario es Reino Unido.