La Ley Lasalle pretende endurecer las penas. Aquellas páginas que alberguen contenido ilegal se enfrentarán a multas que podrían llegar a los 300.000 euros. La principal novedad es que también serán multados los intermediarios, aquellas webs españolas que enlacen con servidores que, aunque en el extranjero, almacenen también contenido ilegal