El verano es la época en la que más gusta lucir una piel bella. Y muchas personas deciden decorarla con tatuajes de henna. Por eso muchos tatuadores bajan estos días a primera línea de playa para hacer sus trabajos. Pero hay que tener mucho cuidado con este tipo de tatuajes. La Unión de Consumidores de Andalucía denuncia que algunos utilizan una sustancia cuyo uso está prohibido en la piel. Sirve para fijar el tatuaje de henna en menos de quince minutos pero puede dar muchos problemas. Una reacción alérgica provoca picores, cicatrices o que la piel pierda su color. También puede producir rechazo de por vida a determinados tintes para el pelo. Una forma de reconocer un tatuaje ilegal es mediante el color. Si no es marrón verdoso, puede causar daños porque está adulterado. Por eso las organizaciones de consumidores piden que se controle la actividad de estos tatuadores.