José Manuel fue desahuciado de su casa en Badalona hace diez meses. La fecha del embargo le pilló por sorpresa y todas sus pertenencias se quedaron dentro del piso, incluso sus gafas y bastón de invidente. Cayó en una depresión, perdió su trabajo y su ceguera empeoró. Ahora ha vuelto a su casa, pero ocupándola con la ayuda de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Los miembros de la PAH piden para José Manuel un alquiler social y sensibilidad para casos como el suyo.