Una marea verde ha tomado esta tarde las calles de Palma de Mallorca. Baleares nunca había visto tanto verde en movimiento.Decenas de miles de personas llevan concentradas desde las seis de la tarde para protestar contra el decreto de trilingüismo en la escuela, aplicado por el gobierno de José Ramón Bauzá, del PP. Familias enteras, jóvenes y mayores se han unido en las reclamaciones del profesorado, que no imparte clase desde que comenzara el culso. Están en huelga indefinida.El PP dice que es una protesta política, alentada desde la izquierda independentista catalana. Pero lejos de ello, el clamor del trilingüismo ha calado en todos los sectores sociales.Y no solo en Palma. A la huelga y a la protesta se han sumado el resto de las islas. Desde por la mañana hasta el anochecer. Un pulso y un mensaje que parece lejos de ahogarse si el Gobierno conservador balear no rectifica.