El presidente del Gobierno ha defendido su política "radical" -la llama- de ajustes, que dice haber aplicado con justicia, en una entrevista, concedida durante la reciente visita del presidente de Austria, Heinz Fischer, a Madrid. Rajoy, en un diario vienés, señaló que esos sacrificios exigidos a los ciudadanos han servido para recuperar la confianza en la economía española.El presidente ha reiterado que su Gobierno heredó deudas inaceptables y hubo "que dar un golpe de timón". "Hoy tenemos de nuevo acceso a los mercados internacionales y hay confianza en nuestra economía", asegura. "El déficit se ha reducido claramente. Se pudo recapitalizar a los bancos arruinados. Las medidas radicales han valido la pena", insiste. Aunque admite que aún queda mucho por hacer, como reformar las pensiones. "El sistema de pensiones será modificado desde su base, estamos trabajando en ello", anuncia Rajoy. Sobre los casos de  corrupción dice que "el comportamiento de unos pocos no puede cuestionar el trabajo serio de otros políticos". "Para mí la prioridad máxima es conducir al país fuera de la crisis, combatir el paro y mejorar la calidad de vida de las personas", concluye Rajoy.