Estudiantes de todas las etapas, profesores y padres han unido fuerzas para salir a la calle en contra de la nueva ley de educación. En 70 ciudades se han convocado manifestaciones en las que se ha gritado en contra de los recortes y se ha pedido la dimisión del ministro de educación. La convocatoria ha sido un éxito para los sindicatos que cifran en un 80 por ciento el seguimiento de la huelga.