Con el cambio de hora este domingo a las doce han vuelto a ser los miles de personas que por duodécima vez hacen que Madrid se quede en blanco, porque la marea en defensa de la Sanidad Pública está de aniversario. Un Madrid que una mañana más que ante la amenaza contra lo público, se termina mareando y que después de un año en la calle se pone la bata para estar como en casa. La manifestación, convocada bajo el lema "La sanidad pública no se vende, se defiende", ya habitual en las protestas de la 'marea blanca', es la segunda tras la paralización cautelar del proceso por el Tribunal Superior de Justicia (TSJM) el 11 de septiembre, que ha llevado a los organizadores a incorporar un nuevo lema: "Hay motivos para seguir luchando".