La temporada de toros ha comenzado en Perú. Y lo ha hecho con una marcha antitaurina que ha llegado hasta la entrada de la Acho, la más antigua del país ubicada en Lima.Aunque los gritos no parecían afectar a lo aficionados, la tensión era patente. Y la policía ha acabado interviniendo.Con gases y chorros de agua han disuelto la concentración, una actuación que algunos han considerado abusiva. Además, dos activistas han entrado en la plaza, donde, tras deplegar una pancarta, han sido desalojados a la fuerza.Al menos tres personas resultaron heridas y varias detenidas.