En otra jornada de manifestaciones, las barricadas se levantan en los alrededores de la sede del Gobierno ucraniano. Los manifestantes resisten en las calles a pesar de las bajas temperaturas y desenrollan largos metros de alambre de espino, para impedir la entrada de los funcionarios vigilados por un fuerte cordón policial. En el epicentro de las protestas, en la plaza de la independencia, rebautizada como' Euromaidán', miles de personas continúan con su lucha. Los ucranianos han vuelto a tomar las calles de Kiev para pedir la dimisión del presidente y la convocatoria de elecciones.