Frente a un ayuntamiento con las banderas media asta, la indignación de cientos de personas: son los vecinos de la familia fallecida. Cuentan que nunca les vieron coger comida de la basura, que se ganaban la vida recogiendo cartones porque el hombre llevaba en paro muchos años. La concejala de bienestar social de Alcalá de Guadaíra ha afirmado que Enrique, el padre, cobraba 426